Procesado.
El procesado de las microalgas incluye posiblemente las etapas que más encarecen el coste final de la biomasa de microalgas. Así que merece la pena valorar qué sistemas son los que mejor funcionan a gran escala a un coste razonable.
Cosechado.
En Algalimento se están valorando diferentes equipos que, por un lado sean lo más eficiente posible y, por otro lado, mantengan un elevado porcentaje de integridad celular, de manera que al seguir protegidos por la membrana celular los compuestos producidos y acumulados por las algas sean más estables durante la conservación del producto.
Extracción de moléculas de alto valor.
Uno de los principales inconvenientes que surge ante el planteamiento de un desarrollo industrial de formatos alimentarios elaborados a partir de microalgas es el elevado precio que la materia prima, la biomasa de microalgas, tiene con respecto a los productos hortofrutícolas.
La estrategia para aumentar la rentabilidad de la actividad de producción de microalgas pasa por la reducción de los costes de producción y procesado que debido al grado de tecnificación requerido son, hoy en día, elevados. Sin embargo poco a poco va tomando cada vez más relevancia el concepto de fraccionamiento de la biomasa y valorización de los subproductos para incrementar el valor de la materia prima. Al comparar los precios de los distintos productos procedentes de microalgas en el mercado observamos el elevado precio que ciertos productos procedentes de las microalgas alcanzan en el mercado en detrimento de la biomasa deshidratada sin procesado posterior.
Higienización.
El hecho de producir nuestra biomasa algal en tanques abiertos nos obliga a vigilar estrechamente la calidad del producto final. La calidad microbiológica del producto es un parámetro esencial. La elaboración de protocolos adecuados de trabajo y la selección de técnicas de higienización respetuosas con la calidad bioquímica del producto son los principales baluartes de esta actividad.